Six Feet Under (2001-2005)

Hoy acabé una vez más 'Six Feet Under'.

Es la tercera vez en mi vida que acabo de verla, y aún así, todavía no he aprendido a decirle adiós a los Fisher.
No creo que nunca sea capaz de encontrar ninguna obra a la que quiera dedicarle tantísimo tiempo de mi vida, una y otra vez, y cada vez que ésta acaba, sólo elucubro cuánto tiempo será decente que espere para no estar desquiciada por volverla a ver. Y muchas veces mientras la veo, pienso, si alguna vez pierdo a alguien importante, volveré a verla para poder superarlo. Como si ella pudiera solucionar todos los problemas de mi vida, que es real, pobre estúpida.

'Six Feet Under' es, en mi humilde opinión, la obra maestra audiovisual definitiva. No hay ninguna película, ninguna serie, absolutamente nada que sea tan perfecta como ella.
Es el tratado definitivo sobre el sexo y la muerte. Todas las preguntas, todas las respuestas, todos los dolores, todo está ahí, en esa tumba, en esa colina con ese árbol triste y solitario. Somos seres humanos heridos, y eso es todo. Y estamos vivos. ¿Qué es un poco de dolor comparado con eso? Y si alguien dice 'no puede ser tan simple',
¿y si lo es?

Y si hablo sobre el final de 'Six Feet Under'.
Muchos, muchísimos críticos lo han definido como el mejor final para una serie jamás habido y por haber. Pero bueno. Qué saben los críticos. Eso no es garantía de nada. Sin embargo, no hay ni una sola persona de carne y hueso que conozca que no haya llorado con ese final y que no opine exactamente lo mismo. Yo lo opino. Yo veo esa escena final miles, y miles de veces, y lloro y lloro, y ahora mismo escribo esto llorando, y os juro, que viéndola esta noche, después de haberla visto ocho mil veces, el corazón seguía latiéndome como si estuviera completamente loco, y las lágrimas que salen no son de esas banales, son lágrimas fuertes, que salen desde las mismísimas entrañas, desde el mismísimo dolor de estar vivos y el dolor de saber todo lo que tenemos que hacer y el dolor de saber que no vamos a hacerlo.

Siempre que acabo 'Six Feet Under' me siento sola y perdida en el mundo. Totalmente desamparada. Como si no pudiera vivir sin los Fisher un solo día más.

Siento que podría escribir libros y libros sobre 'Six Feet Under', sin embargo me autoimpongo un freno. Porque os he mentido, ahí arriba. He dicho que no conocía a ni una sola persona que no haya llorado con esta serie, y a esa persona la conocí hoy: mi madre.

Convencí a mi señora madre de que la viera y se la vendí con un te cambiará la vida. En los primeros capítulos bromeaba y cada vez que me llamaba a Francia me decía aún no me ha cambiado la vida, ¿a partir de qué capítulo me la cambiará?. Yo, completamente convencida de que no podría existir una persona sobre la faz de la tierra a la que 'Six Feet Under' no le cambiara la existencia. Y que no, por favor, ésa no fuera mi madre.

El otro día, en uno de esos momentos trágicos en los que yo lloraba desconsolada a su lado, me dijo
pero Paula, es una serie, son personajes, no es gente real. yo si veo algo es para entretenerme no para sufrir CÁLLATE, le grité yo, pues esto me resultaba inconcebible.
Me resulta muy inconcebible que alguien sea capaz de observar algo y permanecer con la cabeza tan fría, tan ajena. Quizás porque yo he perdido la capacidad de hacer eso hace muchosmuchos, muchos años. La línea entre el cine y mi vida me parece ya tan diluída, que creo que en algún punto olvidé que puede que no sea así para todo el mundo.
Y eso es algo que me duele, porque a veces, quizás, Six Feet Under, sea la mejor manera que tenga de mostrarme.
Quizás, Six Feet Under es todo lo que puedo abrirme, sobre la mesa de autopsias, todos mis órganos al descubierto.

You can't take a picture, it's already gone.

Photobucket

Comentarios

  1. clap, clap, clap...

    Eu non o podría explicar mellor...

    ResponderEliminar
  2. Gracias Silvia! :)

    (aunque estoy segura de que sí podrías!)

    ResponderEliminar
  3. Qué envidia me das por poder explicarlo tan bien! casi me haces llorar recordando el final :)

    ResponderEliminar
  4. jaja Eu estou poñéndollo agora á miña nai, só leva dous capítulos, pero tampouco creo que vaia chorar cando remate. Iso non é culpa de six feet, é máis cousa de miña nai, que non recordo tela visto chorar con ningunha película, pero é que para ela o cine é outra cousa distinta.

    Sabes que estou dacordo contigo, pero cando eu a rematei (vale que só foi unha vez) non me sentín desconsolado, senón que me sentín feliz. A miña vida tiña bastante sentido, e o medo que tiña á morte remitiu durante moito tempo. Parece mentira que poida haber tanta sabiduría nalgo que se emite por televisión. Iso é cousa para os libros jajaja

    ResponderEliminar
  5. Tamara, gracias jineta :_)
    Te digo lo mismo, estoy segurisisisima de que podéis hacerlo igual o mucho mejor, de hecho me ENCANTARÍA leer una reseña de todos los amantes de Six Feet, no podría parar de llorar!

    Cibri, es que Six Feet (o la HBO, si me apuras) cambió por completo la noción de "algo que se emite por televisión", ya bien tú lo sabes. Six Feet no es una serie de tv porque se le queda pequeño, es una Obra Audiovisual! :D
    ESTARÍAS MUY FELIZ PERO BIEN QUE LLORASTE A MI LADITO ESTRIDENTEMENTE COMO YO.

    ResponderEliminar
  6. claro que chorei jajaja pero estaba moi feliz despois, estaba botando fora anos de non entender nada.

    ResponderEliminar
  7. Nadie puede ser la misma persona que era después de ver Six Feet Under. Recién termino de ver el final. Vi toda la serie en diez días, me habían dicho que era excelente pero recién ahora, después de ocho años de ese maravilloso final, conocí esta historia y, como bien dices, no sé como me voy a acostumbrar ahora a no ver todos los días a los Fisher. Estoy llorando por eso en este mismo momento y la verdad no quiero dejar de hacerlo. Ellos lo merecen. Amo esta serie.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Blog (Elena Trapé, 2010)

Neighbors (Nicholas Stoller, 2014) / Wish I Was Here (Zach Braff, 2014)

La fille du 14 juillet, Swim Little Fish Swim, Sous la jupe des filles, Ocho apellidos vascos, 3 bodas de más