Le fabuleux destin d'Amelie Poulain (Jean-Pierre Jeunet, 2001)

Hoy, por alguna razón, he visto ‘Le fabuleux destin d'Amelie Poulain’ con Joy. Creo que hacía por lo menos 5 años que no la veía, y creo que como muchas personas, a mis 15 años la vi incontables veces, hasta poder recitar de memoria cada instante.
Antes de volver a verla tenía un poco de miedo, porque no estás a punto de comprobar si la película era tan perfecta como te lo parecía hace tantos años, sino que estás a punto de comprobar cuánto queda de ti en ti.

Sé que ya no se puede hablar de Amelie con la boca abierta, que sólo se puede hacer con el corazón cerrado y los dedos llenos de prejuicios y maldiciones, y todo el mundo odia esa película porque durante un tiempo todo el mundo la amó, y a la gente no le gusta sentir que es exactamente igual que el resto de la gente.

Yo no puedo más que rendirme ante los instantes y los colores de las calles, del aire, el ruido de los coches, los pájaros, los ojos excesivamente negros y los zapatos demasiado grandes.
Nunca podré darle la espalda a una chica que busca lo mismo que yo en el mundo, por muy obvia y compartida que sea esa búsqueda. A alguien que, al igual que yo, al igual que tantos, prefiere imaginar una relación con alguien ausente antes que crear lazos con los presentes. Y eso no tiene que hacer sentir especial a nadie, a nadie debería importarle, es un pacto entre la película y tú, que estás solo en tu butaca, que estás solo en tu cabeza, que te sientes solo cuando duermes.

Photobucket


La soledad no entiende de multitudes. El optimismo no entiende de realidad, no entiende de pies sobre la tierra. Y las cosas pequeñas no pueden ser entendidas desde la distancia, asépticamente, solamente pueden ser tocadas sin miedo a ensuciarse las manos con la fruta roja.

No me importa reconocer que Amelie nos hizo dulces y suaves, una vez, y que quizás nos hizo sentir menos solos dentro de nuestra soledad. Y al fin y al cabo, eso es lo que lleva haciendo el buen cine desde el principio de los tiempos.

No me importa nada sobre el mundo, esta noche vuelvo a ser pequeña.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Blog (Elena Trapé, 2010)

Neighbors (Nicholas Stoller, 2014) / Wish I Was Here (Zach Braff, 2014)

La fille du 14 juillet, Swim Little Fish Swim, Sous la jupe des filles, Ocho apellidos vascos, 3 bodas de más