The Future (Miranda July, 2011)

A Miranda July le gusta escribir, dirigir y protagonizar sus películas, al menos eso es lo que hizo en sus dos únicos largometrajes. ¿El ego es un obstáculo para el arte o es su impulsor? Nunca me atrevería a reprocharle a Orson Welles hacer algo parecido, ni a Woody Allen. Ni siquiera se lo reprocharía a Zooey Deschanel por hacer una serie como New Girl que sólo sirve para mirarse el ombligo, porque te hace reír en los días grises y además da gusto mirarla.

Pero Miranda July... Miranda July no es un genio, nada más lejos. Es una mujer que cree que tiene algo que contar, que cree que hay en ella un factor diferencial. Todos tenemos cosas que contar, sean esas cosas viajes por el Amazonas o cómo sobrevivimos a una redada de la mafia rusa, o cómo cocinamos bacalao con salmón al eneldo y luego nos tiramos en el suelo a llorar por culpa de la insoportable levedad de nuestro ser. Las tres historias me pueden interesar por igual si se da alguno de estos factores:

a) Que me lo cuentes de una manera absolutamente innovadora y excepcional.

b) Que si no tienes mucha gracia para contarlo, al menos seas un personaje carismático.

El problema de Miranda July es que se sobrestima. Y eso da mucha rabia. Ella es, en general, alguien que me resulta muy irritante. Y es así como tenemos una película en la que la protagonista siente y padece poco más que un alisado de pelo, un arrebato que la hace dejar a su guapo novio por un señor mayor y estúpido, y grabar vídeos suyos bailando para luego subir a YouTube.

Photobucket

Comentarios

Entradas populares de este blog

Blog (Elena Trapé, 2010)

Neighbors (Nicholas Stoller, 2014) / Wish I Was Here (Zach Braff, 2014)

La fille du 14 juillet, Swim Little Fish Swim, Sous la jupe des filles, Ocho apellidos vascos, 3 bodas de más