To Rome With Love (Woody Allen, 2012)

Desde que fui pequeñita y hasta ahora vi las 40 y pico películas de Woody Allen y es por ello que nunca me atrevería a decir ni una sola mala palabra sobre él o su obra, y que incluso estas malas palabras que pudieran surgir, nacen de mi más profundo cariño y admiración. Porque Woody Allen es un poco ese Hitchcock que nos hace a todos felices: público y crítica, que se suele decir, como dos continentes divergentes, papá e hijo, pues Woody los tienen a ambos contentos, la mayor parte de las veces. Y cuando se dice que "fracasa" (qué verbo tan feo), público y crítica, papá e hijo, también se suelen poner de acuerdo. De esto extraigo que parece ser que todo el mundo entiende a Woody Allen porque es un director que trabaja sobre la superficie, de la que todo el mundo puede opinar sin riesgo a quemarse. ¿En serio?

Lo que hace a Woody Allen un autor es que incluso cuando una película no le sale demasiado bien, falla siendo Woody Allen, falla con su estilo único. ¿Acaso no es eso bello? Woody Allen tiene que fallar. El error lo lleva en la sangre, durante tantos años fue ese personaje perdedor (saber y perder, lo tiene por costumbre) y sin embargo sus películas eran obras maestras por las que tendrías que arrancarte la piel para encontrarles un solo pero. Todos sentimos conocerlo a la perfección porque hemos visto cada pedacito de sus entrañas volcados en todas y cada una de sus películas. Su modo de hablar, su ironía, su cinismo, sus creencias políticas y cómo estas han ido evolucionando, su forma de mirar y pensar a las mujeres, sus delitos y sus faltas, sus obsesiones. Nos las sabemos de memoria y nadie en su sano juicio debería pedirle a Woody Allen que deje de rodar porque es un animal de cine y nos gusta como es. Woody Allen es ese amigo que conocemos como la palma de nuestra mano y que nos gusta visitar una vez al año, pero es mejor aún cuando es ese amigo que conocimos en los años 70, sus años dorados, y (gracias cine por ser perenne) podemos revisitar cuantas veces queramos. Me di cuenta de esto ayer, habré visto cientos de veces 'Annie Hall' o 'Manhattan' pero no he repetido ni una sola de las películas que ha hecho durante los últimos 10 años y que he ido a ver a medida que han ido saliendo. ¿Se podría decir que Woody ha perdido la chispa? No creo que sea justo. De hecho creo que es imposible afirmarlo cuando acaba de hacer 'Midnight in Paris'. Yo creo que lo que le está perdiendo a Woody es, paradójicamente, su miedo a la muerte. Ese miedo y esa hipocondría que tanto nos ha hecho reír años atrás. Nadie quiere desaparecer, Woody no quiere dejar de trabajar, y por lo tanto se ha vuelto rápido y poco certero. Mecánico.

Me hace gracia porque por muy mediocre o insulsa que pueda llegar a ser 'To Rome With Love', nos demos cuenta o no, Woody Allen sigue haciendo lo mismo que hizo siempre y que tanto nos ha gustado: hablarnos de sí mismo. Woody Allen es ahora mismo un turista perdido que se emociona con cinismo (dos términos difíciles de combinar) ante todo aquello que descubre y a lo que quiere aferrarse con todas sus fuerzas por miedo a perderlo. Woody Allen es ese prejubilado que siente la imperiosa necesidad de seguir trabajando para sentirse vivo porque su trabajo es en realidad la sangre que corre por sus venas, el celuloide que vela sus ojos, y el ruido del motor es aquello que impulsa cada uno de sus movimientos. Cualquiera puede ver eso. Woody Allen es aquel que da aliento a nuevos talentos, aunque para hacerlo tenga que poner en marcha una solución chapucera como meterlos en la ducha para que canten ópera, si de ese modo puede seguir haciendo lo que le gusta. Filmar, producir músicos, llámale x. Y la crítica dice: la voz que este hombre ha descubierto es única, una joya, pero hay que matar al loco que se le ocurrió esa puesta en escena y no permitirle volver a hacerlo nunca más. No lapiden a Woody Allen. Él nos ha dado el cine y solo quiere seguir dándonoslo un poco más.

 

Comentarios

  1. Es decir, que se ha vuelto "menos bueno" pero se lo perdonamos porque le hemos cogido cariño. Y no queremos lapidarlo ahora porque tenemos la secreta esperanza de que en cualquier momento volverá a hacer otra gran película y entonces nos dará todo el mundo en las narices. O algo así, ¿no?

    Pues no estoy de acuerdo. Yo creo que lo que pasa es que desde hace unos años tiene una ceguera psicosomática pero tiene engañado a todo el mundo en la productora y le dejan seguir haciendo películas XD

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  2. Para nada. Midnight in Paris es una gran película. Whatever Works. Match Point. La maldición del escorpión de jade. Scoop. Y todas esas en la última década, nómbrame a un director que haya hecho tantas buenas películas en una sola década. El problema es, para mí, que hace demasiadas, y a película por año y con ese ritmo de producción (y de trabajo invertido en ellas por lo tanto) es más que razonable que no todas sean obras maestras.

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  3. ¡James Cameron! (es coña, es coña, ya me estoy autoflagelando)

    Soy un gran admirador de Midnight in Paris y Match Point deberían ponérsela a los chavales en alguna clase del instituto (filosofía, gimnasia, matemáticas, da igual). Pero a pesar de ser grandes películas parece que les falta algo... tal vez es eso, parece que está sacadas adelante con prisa, sin el mimo necesaria para una obra maestra. Algo así como: esto era lo que quería contar, vale, ya está, no lo voy a pulir a más, así llega.

    Y también está seguramente el hecho de que la primera película de Allen sólo la puedes ver una vez. Tiene una forma particular de narrar y la primera vez que ves una película suya te sorprende, te hace reír, te encanta. La siguiente también, pero ya te lo esperas. Y cuando llevas X películas en la que los personajes tienen tics similares, las historias siguen un paralelismo, etc... supongo que se pierde el factor sorpresa. Habrá que intentar ponerle a alguien del futuro Match Point o Midnight in Paris antes que Annie Hall y ver si la segunda realmente pierde fuerza por haber conocido antes los "trucos" del autor.

    Y no sé por qué escribo tanto sobre algo que no sé (será por ser español) y cuando además estoy de acuerdo contigo y ni siquiera he visto Turrón with love... :P

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